¿Qué significa disciplinas espirituales? Prácticas que usamos para acercarnos a una relación más fuerte con Cristo. La disciplina es algo que no viene fácilmente. Disciplinas espirituales no hace nada de bien si no deseamos obedecer la Palabra de Dios. Disciplinas espirituales no hacen nada de bien si no buscamos tener una buena relación con otros. Los motivos son importantes con las disciplinas espirituales. Es mejor no hacerlo que hacerlo con los motivos incorrectos. No debemos ofrendar, orar o ayunar para que la gente nos vea (Mt. 6:16-18). Un buen ejemplo de los motivos incorrectos es lo que pasó con el fariseo y el recaudador de impuestos (Lucas 18:10-14). “Yo ayuno dos veces a la semana…”
¿Qué es lo que piensas cuando piensas en alguien que ayuna? Moisés ayunó 40 días y 40 noches, Juan el Bautista, Jesús ayunando en el desierto, misioneros cristianos, los ayunos de Daniel. ¿Cuántas personas conoces que ayunan regularmente? ¿Cuántos sermones has escuchado acerca del ayuno?
¿Qué es ayunar? El ayuno es la disciplina espiritual más temida y mal entendida de todas las disciplinas.
Desde 1861 a 1954, un periodo de casi 100 años, no se había publicado un libro sobre el tema del ayuno.
El ayuno es temido por dos razones:
1. Asociamos el ayuno con las cosas negativas y con los locos religiosos de la edad media.
2. Nos encanta comer y menospreciamos la idea del sacrificio propio. Una definición bíblica es la abstinencia voluntaria del cristiano de la comida para un propósito espiritual. Aunque hay beneficios físicos en ayunar, este no es el propósito del ayuno bíblico. No es pasar hambres para un propósito político, sino para propósitos espirituales. El ayuno es definido como: “la abnegación voluntaria de las funciones normales de beber y comer para el bien de la actividad espiritual intensa”. En el Antiguo Testamento los judíos fueron mandados por Ley a ayunar en ciertas ocasiones, ¡pero hoy el ayuno es un privilegio y no una ley!
El congreso proclamó tres ayunos nacionales. Abraham Lincoln proclamó un ayuno nacional en tres ocasiones. A cada judío se le mandó que ayunara el día de la expiación (Lev. 16: 29-31) y si descuidaba hacerlo, ¡el castigo era la muerte! Había cuatro ayunos judíos adicionales, los cuales fueron instituidos en Babilonia (Zac. 8:19), y tuvieron 28 ayunos voluntarios. No hay ni una sola indicación en las Escrituras que indique que ya no se necesario ayunar. Muchas personas ven el ayuno como un rito Antiguo Testamentario que no se espera que los cristianos practiquen, pero el ayuno se espera así como se espera la oración. Así como Jesús asume que ofrendaremos y oraremos, Jesús asume que ayunaremos. Él dijo: “pero cuando ayunes” , y “ayunarán” (Mt. 6:16-17; 9:14-15). Los cristianos del libro de los Hechos ayunaron–ellos son nuestro ejemplo (Hechos 13:1-3). Si seremos una Iglesia del Nuevo Testamento, no sólo podemos serlo en nuestra doctrina, pero también tenemos que serlo en práctica. No podemos estar escogiendo qué tipos de ejemplos y qué prácticas seguiremos del Nuevo Testamento. ¿Por qué observamos la Santa Cena? Por causa del ejemplo bíblico que se nos presenta (Hechos 20:7). ¿Acaso el ayuno no es un ejemplo bíblico también? No, Jesús no mandó que se ayunase, pero sí lo practicó. Los apóstoles nunca mandaron que se ayunara, pero lo practicaban. A veces pienso que nos gusta la idea y el concepto de ser como la Iglesia del Nuevo Testamento, pero solamente cuando es conveniente y no requiere sacrifico.
por Ed Clay, Antioch, TN