La siguiente carta al editor que fue impresa en septiembre de 1999, en la publicación de The People News del Condado de Bradley es presentada aquí como un seguimiento de la columna de Historia de la Iglesia del mes pasado la cual mostraba fotos de nuestro antiguo Tabernáculo de Asambleas mientras estaba siendo derribado. Esperamos que disfrute de algunos de los detalles históricos de esta carta.
¡ESO DUELE!
Estimado editor:Algo está ocurriendo en la ciudad de Cleveland que ha entristecido los corazones de muchas personas, no solamente en Cleveland y el condado de Bradley, sino en todo el mundo. Usted puede que se pregunte ante una declaración tan extensa, pero al leer esta carta, estoy seguro de que comprenderá lo que quiero decir con dicha declaración.
Lo que está ocurriendo es la conclusión de una gran tragedia. La situación en sí es inofensiva y casi inocente, pero lo que ha llevado a esta tragedia es un asunto serio. A lo que me refiero es del desmantelamiento del Tabernáculo de Asambleas en la calle Keith.
Para comprender esta tragedia, uno debe regresar y mirar la historia de este edificio y la razón por la que fue construido al principio. Este edificio fue construido por y para la Iglesia de Dios de la Profecía con el propósito de tener un lugar de reunión para sus Asambleas Generales Anuales de todo el mundo.
Todos los antiguos residentes del condado de Bradley saben cómo la Iglesia solía reunirse allí en la Avenida Centra en el antiguo Tabernáculo mientras un espíritu de unidad y misiones predominaba en esta organización.
Cuando ese antiguo edificio quedó obsoleto y anticuado, Dios permitió a la Iglesia que comprara una propiedad de primera calidad en la calle Keith, que era un área en gran parte sin desarrollar en ese momento. Con más de cuarenta acres comprados, la Iglesia se propuso construir un nuevo Tabernáculo de Asambleas, una Casa de Publicaciones y un Complejo de oficinas. Dios favoreció a la Iglesia, y todo esto se logró en 1976, cuando fue construido el último edificio.
Todos tenían un espíritu sincero de dar y trabajar juntos para el avance de una buena causa, que fue inspirada por Dios a través del liderazgo de la Iglesia. Muchos sacrificaron sus recursos financieros para ver estos edificios levantarse para la gloria de Dios.
El año en que se terminó el Tabernáculo de Asambleas fue en 1972, el mismo año en que nació mi primera hija. Su primera asamblea a los tres meses de edad también fue la primera asamblea que se celebró en este edificio.
El fervor era muy intenso. Hubo una asistencia registrada de más de 25,000 ese primer año. Veinte años después vió la última Asamblea que fue celebrada allí. Ese fue el año de 1991, un año que todos los miembros de la Iglesia de Dios de la Profecía nunca olvidarán. Este fue el segundo año en que el sucesor de M. A. Tomlinson como Supervisor General moderara una Asamblea.
Este año se produjo una importante desviación de la doctrina bíblica que la Iglesia había defendido tan ardientemente. Esta triste Asamblea fue la principal crisis de esa organización. Debido a que no corregirían su error cometido en la Asamblea de 1991, muchos finalmente tuvieron que retirarse de esa organización y continuar con La Iglesia de Dios.
Dios convocó una Asamblea Solemne en julio de 1993 que tuvo lugar en Chattanooga, donde Dios ordenó a un nuevo Supervisor General para recoger los restos del buque naufragado y continuar con la Iglesia.
Por supuesto, la organización anterior continuó como siempre, pero no sin un empeoramiento del espíritu y doctrina. Como dijo un ministro: “Tienes que dejarlo para quedarte con él, y si te quedas scon él lo has dejado”. Desde entonces su doctrina ha visto una gran metamorfosis. La verdadera Iglesia salió y ha continuado con la doctrina original y ha llegado a más de veinte países en los últimos seis años. No teniendo acceso a este edificio, ellos (nosotros) necesariamente hemos estado celebrando nuestras asambleas anuales en Chattanooga en el Memorial Auditorium. (las fechas para este año son del 2 al 5 de septiembre).
De acuerdo con la ley de Tennessee, cuando una organización de una iglesia se divide, la que se adhiere a la doctrina original es la que tiene el título de toda la propiedad. Dado a que el verdadero remanente era muy pequeño al principio (1993), no parecía apropiado llevar a delante tal tarea.
Pero además de eso, teníamos el mismo espíritu hacia este desafortunado evento que tuvo Abraham cuando él y su sobrino, Lot, tuvieron que ir por caminos separados. Lot eligió las atractivas llanuras verdes, dejando a su tío Abraham que tomara las escarpadas colinas áridas. Abraham permitió que Lot se saliera con la suya sin problemas y Dios honró a Abraham y lo bendijo mientras Lot terminó en serios problemas en la ciudad de Sodoma.
Con un entendimiento de la aplicación espiritual de todas estas cosas, usted puede ver por qué nosotros, como miembros de La Iglesia de Dios, nos entristece cuando vemos la desaparición de un edificio que nos trae muchos recuerdos y un edificio que ayudamos a construir con nuestras finanzas y apoyamos con nuestras oraciones y fidelidad.
Este edificio y propiedad fueron comprados con dinero dado para propósitos santos y fueron dedicados a Dios para Su gloria divina y honor. Se siente como que una parte de nosotros ha sido arrancada y desechada para nunca ser recuperada. Se siente como si hubiéramos sido ultrajados espiritual o moralmente con nuestro honor arrastrado por el polvo por el liderazgo equivocado de una organización equivocada.
Sí, duele conducir por la calle Keith y ver que este edificio está siendo destruido por extraños que no saben lo que están haciendo. Que se entienda que no estamos lanzando piedras a estos extraños porque ahora ellos tienen el derecho legal de hacer cualquier cosa que deseen con esta propiedad ya que la han comprado para su propio uso. Pero para nosotros que conocemos mejor la situación, sabemos que una organización que se había alejado durante muchos años de su estabilidad espiritual ha hecho lo impensable al permitir que las cosas lleguen a esto.
Este edificio ha tenido muchos erróneos informes negativos sobre su seguridad y estado de reparación. Deliberadamente nos informaron mal durante una de las últimas una o dos Asambleas celebradas allí sobre el costo de llevar este edificio al reglamento en lo que respecta a la seguridad contra incendios.
El honor del Jefe de Bomberos en ese momento se vio dañado a fin de que la Asamblea fuera persuadida a una dirección alejada de Cleveland para estas reuniones anuales. Su honesto informe afirmaba que se necesitaría una cierta cantidad para reparar los conductos del aire acondicionado para hacerlos resistentes al fuego, y afirmó que estaba dispuesto a trabajar con nosotros en el plazo de la reparación de este problema.
El liderazgo aprovechó la oportunidad para agregar muchas otras cosas al presupuesto de reparación, que aumentó de alguna manera de alrededor de $60,000 a alrededor de $250,000, sabiendo que esto influiría en la Asamblea para aceptar su propuesta de sacar las asambleas de Cleveland. Muchos miembros confiados aceptaron su informe sin cuestionamientos y los siguieron “al precipicio”, sin darse cuenta a dónde iban.
Suficientemente dicho sobre esta parte, ahora volveremos a la parte que duele. He hablado con miembros de La Iglesia de Dios y la Iglesia de Dios de la Profecía. Recibo la misma respuesta de ambos lados que “duele” (con sus propias palabras) al ver que este edificio es derrumbado. También he hablado con algunos que no son miembros de ninguna de las organizaciones que dicen lo mismo.
Este edificio guarda muchos buenos recuerdos para los miembros y también para los no miembros. Muchos jóvenes residentes del condado de Bradley recibieron sus diplomas de la preparatoria en ese edificio y siempre apreciarán el momento y lo que significó para ellos personalmente y para la comunidad en general. Ahora, con el único edificio en esta área adecuado para tal evento siendo derribado, esto deja a las preparatorias del área a realizar sus ejercicios de inicio de temporada en el campo abierto en un clima a veces desagradable.
No todos estos recuerdos personales son los que importan cuando está en juego el llamado “progreso” (o retroceso en este caso). Lo que realmente importa es el dolor superior a todos los demás dolores de que Dios haya sido deshonrado por el hecho de que una organización no cumpliera con su pacto que hicieron con Él.
Las almas están en juego, pesadas en la balanza de un Dios justo. Muchos han negado su testimonio anterior ante un mundo expectante y ahora se han mezclado con este mundo en una masa inidentificable. La alguna vez preciosa doctrina bíblica que tan amorosamente adoptaron ha sido relegada a simples ideales que parecen ser tan cambiantes como el clima. La obligación de su pacto de guardar y practicar esta doctrina ha sido quebrantado. Aquí es donde entra la tragedia. Sé que muchos de los que lean esto no comprenderán completamente las verdades espirituales mencionadas aquí, pero el contacto vecinal para las relaciones con nuestra comunidad ayudará a sobrepasar esta falta de entendimiento.
Cuando este edificio estaba en construcción yo caminaba alrededor y observaba el progreso de la construcción. Recuerdo bien cómo se veía el edificio con solo las paredes de metal y el simple piso sin ningún corredor exterior, etc. en su lugar.
Hoy, me detuve para ver de primera mano cómo se vería en el modo “destrucción.” Encontré las mismas paredes de metal y pisos simples con las cosas antes mencionadas que faltan. La GRAN diferencia era la basura y todos los escombros echados allí. Había graffiti en las paredes y algunos letreros en el suelo. Esto me recordó los momentos en que el Espíritu de Dios se movía durante algunos de los buenos servicios a los que asistí allí.
Mis nietos estaban conmigo y mi nieto de cinco años dijo: “Papá, necesitamos orar por la asamblea para que Dios haga que sean tan buenas como lo fueron aquí”. Su concepto de la Asamblea se relacionaba únicamente con el estado del edificio y se basaba en lo que yo le conté sobre los años anteriores a su nacimiento. Parece que este dolor incluso se ha extendido a su joven generación a través de la asociación con aquellos mayores que realmente experimentaron estos cambios drásticos.
Uno no puede evitar preguntarse qué deparará el futuro. ¿Cómo será ir de compras donde una vez lloramos, oramos y adoramos a Dios mientras nos alimentábamos de la Palabra de Dios bajo la unción de un mensaje lleno del Espíritu? Además, supongo que habrá una luz roja más en la calle Keith para detenerse mientras intentamos atravesar la ciudad de Cleveland. ¿Qué sucederá con el resto de la propiedad de esta organización? ¿Serán vendidos eventualmente, haciendo aún más centros comerciales de los que Cleveland ya tiene demasiados? ¿Quién sabe?
¿Alguien se ha detenido a preguntarle a Dios cómo se siente? ¿Qué piensa Él sobre todo esto? ¿Lo aprueba? Después de todo, este edificio fue construido para Su gloria y dedicado a Él. ¿Le duele también ver que le quitan algo y lo usan para una plaza secular? Uno solo puede pensar estas preguntas.
Pero mientras tanto, mientras el Tabernáculo de Asamblea continúa siendo derribado hasta el suelo, seguirá doliendo.
Continuará doliendo por alguno tiempo mientras el recuerdo esté vivo en sus mentes y corazones.
Gracias a Dios, sabemos que este dolor es solo temporal, porque en ese suelo eternal con Dios, el recuerdo de todas las cosas terrenales será borradas de nuestras mentes, y estaremos felices y contentos con Él para siempre.
El Historiador, el Diacono Walter Lofton